El miedo paraliza a los periodistas en Los Ríos y la violencia los desplaza internamente

18.09.2025

Los Ríos es la cuarta provincia más poblada del Ecuador, con 898.652 millones de habitantes. Es un territorio dedicado principalmente a la agricultura y a la producción de banano, maíz, cacao y arroz, ubicado en la Costa ecuatoriana pero sin acceso al océano.

Pese a su gran aporte a la economía local, el 74% de los habitantes de esta provincia viven en condiciones de pobreza, de acuerdo a los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC). La falta de vivienda, la deserción educativa y la deficiente atención sanitaria son algunas de las causas que afectan al territorio y a su gente.

Los embates climáticos también han golpeado a esta provincia en 2025. En febrero se desbordaron siete ríos, lo que afectó principalmente a los cantones de Babahoyo y Urdaneta, en los que se reportaron viviendas anegadas, cultivos destruidos y daños estructurales en las comunidades rurales.

A esta situación se suma la criminalidad y la violencia en la que se ha visto sumida la provincia desde hace tres años. En 2023, Los Ríos se convirtió en una de las zonas más peligrosas de Ecuador, con 1.017 muertes violentas. En 2024, la situación no mejoró; la provincia registró 812 casos, y entre enero y mayo de 2025, la cifra asciende ya a 495, según el monitoreo del Observatorio Metropolitano de Seguridad Ciudadana y Gestión de Riesgos.

Para Carla Álvarez, docente e investigadora en temas de narcotráfico, política de control de armas y seguridad del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), la situación de violencia que atraviesa la provincia de Los Ríos se distribuye de manera desigual en su territorio, pues hay cantones más pacíficos y hay otros que son extremadamente violentos.

Por ejemplo, en Ventanas hay una tasa de 10 muertos por cada 100.000 habitantes, mientras que Babahoyo tiene una tasa de 51 muertos por cada 100.000 habitantes y Puebloviejo contabiliza 145 muertos por cada 100.000 habitantes. “Esto debería escandalizar al Gobierno Nacional, pero como se leen los grandes datos, los macro, a veces pasan desapercibidas estas localidades”, asegura.

Para la experta, la situación geográfica de Los Ríos la convierte en un sitio de tránsito muy atractivo para las actividades ilícitas, pues es una provincia de paso, que conecta la Costa con la Sierra. De un lado colinda con Guayas, cuya capital es Guayaquil que tiene el puerto más importante del país. Y del
otro colinda con Bolívar y Cotopaxi, por cuyas carreteras se estaría transportando la droga desde Colombia.

“Podría ser que la provincia no solo sea un lugar de paso, sino de almacenaje de alcaloides previo a la exportación. Debes tener en standby a la droga hasta que consigas la manera adecuada de exportarla. Esto quiere decir que hay que determinar cómo se van a contaminar los containers, en qué puerto, tener claridad a quién se va a sobornar o cómo se va a hacer el trabajo de contaminación de barcos”, explica.

El testimonio de Álvarez coincide con los decomisos que se han realizado en la provincia. Una muestra es el decomiso de 22 toneladas de cocaína, valoradas en 1.100 millones de dólares, en una caleta en el cantón Vinces a inicios de 2024. Según el portal Insight Crime esta ha sido una de las mayores incautaciones de cocaína realizada en el mundo.

La violencia criminal viene acompañada de extorsiones y secuestros, motivados principalmente por la disputa del territorio entre dos bandas: Los Lobos y Los Choneros, que buscan aumentar su poder económico en la zona. La criminalidad ha golpeado en todos los ámbitos: uno de los hechos más recientes fue el secuestro extorsivo de la concejala Germania Coello, en mayo de 2025. Dos días después fue liberada en el cantón Mocache.

En ese contexto, los ciudadanos viven con temor a ser secuestrados y extorsionados. Marco Franco, presidente de la Cámara de Comercio de Quevedo, declaró a los medios de comunicación locales, que en esta ciudad 1.600 negocios han cerrado por el temor a ser extorsionados.

En lo que va de 2025, la provincia ha estado incluida en tres estados de excepción. El primero comenzó el 3 de enero, con una duración de 60 días; el 3 de marzo, el Gobierno lo renovó por 30 días más. En abril, el Ejecutivo volvió a decretar estado de excepción en Los Ríos. En esa ocasión, fue la única provincia en la que la medida se extendió a todos sus cantones.

En medio de este panorama de violencia e inseguridad, los periodistas intentan seguir informando, aunque reconocen que lo hacen con mucho temor. Al igual que en otras provincias del Ecuador, la autocensura es la principal medida de seguridad que han implementado los periodistas para protegerse. También han optado por realizar coberturas grupales, no firmar la autoría de sus notas periodísticas y evitar cubrir a profundidad el crimen organizado.

Esta realidad hizo que el trabajo de recolección de información para el levantamiento de este informe sea especialmente complicado. La Fundación Periodistas Sin Cadenas (FPSC) se comunicó con más de 10 periodistas de la zona para entrevistarlos.

Al menos cinco de ellos declinaron, aduciendo temor a ser identificados y recibir amenazas posteriores. De los cinco periodistas sí fueron entrevistados para este informe, dos se han desplazado a otras provincias para ejercer su trabajo.

Como se verá más adelante, la principal razón que alegan es la violencia y las pocas garantías para trabajar con libertad. Además de las entrevistas, este informe incluye la información de un focus group que FPSC realizó en Quevedo, la ciudad más grande de Los Ríos, al que asistieron 12 periodistas, cinco hombres y siete mujeres. También incluye entrevistas a expertos y autoridades nacionales y locales.

Este es el séptimo informe que la FPSC levanta sobre el periodismo local con la intención de mapear las condiciones y las dificultades en las que se desempeña este oficio en Ecuador.

Descarga el informe aquí:

Publicado el Provincias